El Silencio de la Madrugada Inunda Almagro
A la 1:30 de la madrugada del Viernes Santo, las históricas puertas de la ermita de San Juan se abrieron para dar inicio a la conmovedora Procesión del Silencio. Este evento, organizado por la Hermandad de Jesús de las Tres Caídas y María Santísima de la Esperanza, se ha convertido en una tradición respetada y profundamente emotiva en la ciudad de Almagro.
Jesús de las Tres Caídas, venerado como el Señor de San Juan, avanzó solemne por las iluminadas calles, portado a varal por un grupo dedicado de 60 hermanos. A su lado, la Virgen de la Esperanza, llevada con devoción por 30 costaleros, ofrecía su mudo testimonio de consuelo y fortaleza, apenas acompañada por el tenue resplandor de las antorchas y el sutil redoble del tambor de los armaos.
Durante estas horas de penumbra, Almagro revivió los pasos de Cristo hacia el Calvario. La presencia silenciosa de la Virgen simbolizaba la fe inquebrantable y la luz que guía en medio de la oscuridad. Este acto de penitencia no solo recrea la Pasión, sino que también invita a la reflexión y contemplación de los creyentes.
Este año, el paso del Señor ha recibido significativas renovaciones, incluyendo una nueva cruz y la imagen del Cirineo, obra del reconocido Manuel Luque Bonillo. El paso de palio de la Virgen también ha estrenado una serie de elementos suntuosos: una nueva corona y puñal diseñados por Raúl Cejas, junto con una bambalina frontal y faldón delantero bordados en hilo de oro, realizados en los prestigiosos talleres Virgen de la Salud de Jesús Díaz Hellín. Además, la candelería ha sido creada por la destacada Orfebrería Juan Angulo de Lucena.
La noche se vivió con intenso fervor, respeto y una belleza que conmovió a los muchos vecinos y vecinas que acudieron a las calles de Almagro para presenciar esta procesión única en su sereno esplendor.
Fuente: Facebook Ayuntamiento de Almagro